"¿QUE ES HACER CONSCIENTE LO INCONSCIENTE?. Cap III.- Esquema General de lo Inconsciente"

En el Texto “Lo Inconsciente” de 1915, Freud propone el siguiente esquema para describir las neurosis de transferencia.

Primer momento:   
Pulsión – Rechazo – carga inconsciente de libido de la idea rechazada – Angustia.
En el sistema Inconsciente existe una fuerza, que tiene una carga, que aspira a pasar al sistema Pre-consciente. Este sistema la rechaza y, para hacerlo, instala una contracarga. Pero como esta fuerza cargada insiste en querer pasar, lo hace como una carga inconsciente de libido de la idea rechazada, que aparece como angustia.

Segundo momento:  
Repetición del proceso: sustitución por desplazamiento.
Para vencer el penoso desarrollo de la angustia, este proceso se repite. Pero la idea rechazada es sustituida por otra (alejada de ésta) que logra sustraerse a la represión. (ej. Miedo al padre - miedo a caballos). A este proceso se le llama sustitución por desplazamiento y permite racionalizar el desarrollo de la angustia.

Tercer momento: 
Idea sustitutiva como contracarga.
Esta idea sustitutiva desempeña el papel de una contracarga para el sistema consciente, asegurándolo contra la emergencia de la idea reprimida. En el ejemplo anterior, el niño ya no le tiene miedo al padre, pero si mucho miedo al animal. El miedo es alimentado por la pulsión inconsciente, la cual se muestra superior a influencias del sistema consciente. Esto sucede cuando se intensifica la pulsión reprimida y cuando se percibe al animal que produce la angustia.

Cuarto momento:
Muralla defensiva.
Esta situación produce que se vaya instalando una muralla defensiva alrededor de esta idea sustitutiva, en la cual se van incorporando otros objetos relacionados que están investidos de la misma carga psíquica y que presentan sensibilidad a esa excitación. De esta manera, la excitación de cualquier punto provoca angustia y esta se transforma en una señal para coartar la continuación del desarrollo (nueva fuga por parte de la carga. Ej, fóbia).


Cuanto más lejos de la sustitución temida se encuentra las contracargas sensitivas y vigilantes, más preciso funciona el mecanismo que aísla a la idea sustitutiva y la protege contra nuevas excitaciones. Estas precauciones protegen contra la excitación exterior (percepción), pero no contra la excitación pulsional, que al conectarse con la idea reprimida llega a la idea sustitutiva.

Quinto momento:
Se realiza el mismo proceso del primer momento, pero en torno a la idea sustitutiva y con otro sustituto. 

A cada intensificación de la excitación pulsional avanza la muralla protectora que rodea a la idea sustitutiva. El sistema Consciente se protege también contra la actividad de la idea sustitutiva, a través de otro sustituto, de la misma manera como inicialmente se protegía contra la emergencia de la idea reprimida. Por lo tanto, se crea un sistema de formación de sustitutivos por desplazamiento. 

A través de todo el mecanismo de defensa puesto en actividad queda el peligro pulsional proyectado al exterior. El YO se conduce como si la amenaza del desarrollo de angustia procediese de una percepción y reacciona contra ésta a través de las tentativas de fuga que suponen las evitaciones de la fobia. 

Primero existía solo un punto donde podía abrirse paso la pulsión reprimida: la idea sustitutiva. Luego, toda la construcción exterior fóbica constituye un campo abierto de “enclave” a las influencias inconscientes. Este proceso represivo pone un dique a la génesis de la angustia, pero a costa de grandes sacrificios de la libertad personal. El resultado de la fuga fóbica es siempre insatisfactorio.

Si bien aquí se realizó una descripción a partir de la fobia, esta estructura se daría de forma similar en los otros dos tipos de neurosis. La diferencia sería que en la Histeria de conversión se transforma la carga pulsional de la idea reprimida en inervación del síntoma y en la Neurosis Obsesiva se muestra más visible la contracarga a través de la formación reactiva.

En cambio la Esquizofrenia, que Freud llama Psiconeurosis Narcisistas, presenta ciertas características que en las Neurosis de Transferencia no existen y que serían indispensables para el conocimiento del Inconsciente. En estos casos, llama la atención la relación del Inconsciente con el lenguaje, en tanto las palabras quedarían sometidas al proceso primario, a través de la condensación y el desplazamiento, de forma similar al de las imágenes oníricas. También en esta estructura, existirían ciertas particularidades en las relaciones palabra-cosa y en la constitución de la imagen del objeto en el aparato psíquico.  

Después de visualizar la complejidad de este esquema 
¿Cómo se podría, entonces, hacer consciente lo inconsciente? 

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